Se espera que el mercado de IA en ciberseguridad crezca de 1 billón de dólares a 34,8 billones de dólares para 2025. Con hackers cada vez más sofisticados, datos en constante crecimiento y superficies de ataque que se expanden,... los expertos en seguridad informática deben utilizar todas las herramientas a su disposición para proteger los datos. La inteligencia artificial es una de ellas. Pero, si bien esta tecnología es sumamente valiosa para la protección contra amenazas cibernéticas, no está exenta de riesgos.
6 ventajas del uso de la IA y la ciberseguridad
Capaz de procesar enormes volúmenes de datos a velocidad de rayo, la IA emerge como un aliado indispensable en el ámbito de la ciberdefensa. Estas son sus ventajas.
1 - El error humano
Siendo el error humano algo inherente, en ocasiones puede resultar dramático en seguridad informática. Esto es porque, en momentos de reemplazo, modificación o actualización del sistema de red, estos errores son aún más susceptibles de ocurrir; dejando así puertas abiertas a hackers con malas intenciones.
La IA permite precisamente reducir los riesgos de incidentes en ciberseguridad. Y es que los equipos de TI ya no necesitan manejar más procesos manuales de manera interminable. En su lugar, la inteligencia artificial los automatiza. Si se entrenan adecuadamente, los modelos de inteligencia artificial incluso pueden ayudarte a identificar errores.
El uso de inteligencia artificial en ciberseguridad es aún más crítico dado que el error humano es la causa principal de los ataques informáticos.
2 - Las tareas recurrentes
Para implementar un sistema de gestión de seguridad informática efectivo, es fundamental llevar a cabo ciertas tareas, especialmente aquellas relacionadas con la configuración de la red. No obstante, estas tareas esenciales suelen ser muy extensas. Los expertos en ciberseguridad pueden pasar horas configurando la red, en lugar de concentrarse en el análisis de vulnerabilidades.
Afortunadamente, la IA puede encargarse de estas tediosas tareas y automatizarlas.
Al estar libres de tareas manuales, los expertos informáticos pueden dedicarse a realizar vigilancia tecnológica para estar al tanto de las últimas prácticas cibernéticas, estar más alerta ante posibles amenazas y reaccionar en tiempo real.
3 - La detección de amenazas
La gran capacidad de la IA en ciberseguridad radica en su habilidad para procesar grandes cantidades de datos de manera continua. En cualquier momento, puede identificar nuevas brechas, nuevos riesgos, actividades inusuales o anómalas, etc.
Y lo que es más importante, los algoritmos de machine learning son inteligentes. Cada vez que se encuentran con una nueva amenaza, aprenden sobre su método de operación, las acciones a tomar o evitar, su tiempo de respuesta,…
4 - El tiempo de respuesta
En caso de ataques cibernéticos, uno de los factores clave para el éxito de los agresores es el tiempo de reacción a los incidentes. Cuanto más tiempo tardan los expertos informáticos en responder a los ataques, más oportunidad tienen los hackers de infiltrarse en el sistema y causar daños a menudo irreparables. Con ransomware como LockBit, 30 minutos son suficientes para penetrar la red.
Para prevenirlo a tiempo, los profesionales de la seguridad informática deben primero identificar los ataques rápidamente. El problema es que tienen que manejar cantidades astronómicas de datos. Aquí es donde la IA juega un rol crucial. Facilita abordar el exceso de información procesando los datos disponibles mucho más rápido de lo que un humano podría. En minutos, los modelos de ML pueden extraer datos de un ataque, procesarlos, analizarlos y entregar informes simplificados. Sólo queda tomar la mejor decisión respecto al tratamiento de la amenaza.
Bueno saber: Cuidado, aunque la IA se presenta como un recurso valioso en ciberseguridad, no sustituye la experiencia de un CISO. Sirve como complemento a sus habilidades técnicas. De ahí la importancia de formarse continuamente en ciberseguridad.
5 - La toma de decisiones
Cada día, los expertos en ciberseguridad deben tomar decisiones que impactan significativamente en la organización. Esto también genera fatiga por toma de decisiones. Por falta de recursos, muchos se concentran en las decisiones más urgente y críticas, dejando de lado otras. Sin embargo, es a través de pequeñas vulnerabilidades por donde los hackers a menudo se infiltran en la red. Así, para cubrir todas las vulnerabilidades, pueden recurrir a la IA en ciberseguridad. Por ejemplo, mediante agrupación por etiquetado automático para simplificar la gestión de cada amenaza. O incluso, para delegar la gestión de ciertas amenazas directamente al algoritmo.
6 - La gestión de datos
La inteligencia artificial puede contribuir en la gestión de datos personales (especialmente en el marco del RGPD). Por ejemplo, los algoritmos pueden realizar una cartografía de los datos recopilados, identificar los datos más relevante y asegurar los datos que contienen información personal (especialmente a través de la anonimización).
No obstante, dado que la protección de datos es un tema especialmente sensible, es prudente considerar la relevancia de la IA en este aspecto. ¿Es fiable?
Riesgos que no deben ser ignorados
Si bien los expertos en ciberseguridad recurren cada vez más a la IA, no son los únicos. Los hackers con malas intenciones también saben cómo aprovechar el potencial de la inteligencia artificial.
Estos últimos perfeccionan su técnica de ataque con, por ejemplo, la suplantación de identidad, el spearphishing, la selección de objetivos o la creación de perfiles falsos.
Además, la IA generativa es ampliamente utilizada para refinar ataques de phishing. Los intrusos son capaces de generar automáticamente información falsa (un sitio web personalizado, un correo electrónico de una entidad oficial que usa datos personales…) para engañar a su víctima. Estos son los famosos deepfakes que causan cada vez más daños.
El desafío para los expertos cibernéticos es precisamente no quedarse atrás frente a los hackers y mantenerse siempre al día con los nuevos ataques y técnicas utilizadas.